Que llueva, que llueva...
- Santi Iglesias de Paul
- 25 ene 2024
- 3 Min. de lectura

Como no llueva lo suficiente, en verano lo vamos a pasar mal. El agua, por lo general, es fuente de vida. Bendita lluvia. La pertinaz sequía no es una cuestión de los años 40, algo que Franco lo solía mentar muy a menudo. Así que ojalá llueva, y si es "café en el campo" como decía Juan Luis, mejor. Pero que llueva más y mejor, jolines. Hablando de café, a mí más que café ma he llovido el famoso maná. Os cuento...
Pues esta semana me llevé una alegría. La fundación SGAE ha concedido una subvención, en forma de ayuda en metálico, a mi última novela "Aquella música tan estupenda" lo cual es genial. Con ello, el balance económico de la novela ya resulta rentable y puedo con ello seguir tomando cañas, que es muy de agradecer. Desde aquí, un saludo afectuoso a "Estrella Galicia".
¿Me sueltan mucha pasta? No, sólamente una ayudita de 615 euros, imprescindible para poder pagar la edición, y que me viene la mar de bien. Viva la SGAE y también su fundación, a la par que su presidente y consejeros, porque subvencionar la cultura es todo un detalle que agradecemos. Muchas gracias y a ver si os gusta la novelita.
Sobre esto de las novelas, por supuesto, yo no soy el único que escribe. En concreto mi amiga Laura Martínez Alarcón acaba de publicar EL BAUL DE LA REPÚBLICA, una novela que tuve la suerte de corregir en el aspecto marítimo, pues fundamentalmente la trama se desarrolla en un barco de exiliados españoles tras la guerra civil 36/39 (pongo esto de los años, porque aquí, como ha habido cientos de guerras civiles, es bueno concretar. Sí, desgraciadamente siempre nos estamos dando de tortas. Qué cruz. A ver si aprendemos de una vez que con palabras y gestos se resuelven mejor los problemas que con arrasar aldeas y pueblos, balas, obuses y torpedos MK44 (Se nota mis notables estudios marinos en esto de citar con estas siglas así a los torpedos)
El caso es que ahora acabo de leer la novela de Laura, y me ha gustado mucho. Porque no sólo habla de la tragedia del exilio, sino que describe entre sus capítulos una historia de amor estupenda. Sensacional. Muy bien, Laura. Tanto me ha gustado, que yo, que sólo suelo leer por las noches, he cogido también la novelita por las mañana y así la leía tranquilamente en el salón. Ya digo: una gran novela.
Entre esto del leer y el pasear, se me pasan los días. Ya sólo falta que adelgace y lo bordo. En este sentido estoy acometiendo con mucho entusiasmo y alegría, y algún torrezno que otro, la XXVII operación biquini. Es de reseñar el fracaso estrepitoso de las XXVI ediciones anteriores, que naufragaron con barquitos en suculentas salsas, patatas fritas y mejillones a la marinera. Hago votos por los inmejorables resultados que obtenga ahora, en esta edición llena de optimismo, y conseguir el ansiado tipito de atleta que todos deseamos (más cercano al de triathlón que al de halterofilia/Judo peso pesado) .
Creo que es mejor pasear acompañado que en solitario (lo mismo sucede en la vida, porque una vida en soledad es cansina). Así que cuando no pasee con Ana, intentaré hacer caminatas con otros amigos y así me pongo manos a la obra. Nada más sencillo: coges el móvil, llamas y citas a tu amigo para dar un garbeo y en la mayoría de los casos aceptan el reto, compaginando así palique y paseo. Voy cogiendo el móvil y buscando bares con torreznos próximos a futuros paseos.
Eso es todo por esta semana. Besos y abrazotes y que por favor, acaben las putas guerras.
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Mil gracias, Santi, por tus palabras y por recomendar EL baúl de la República. Este año, en junio, se cumplen 85 años de la llegada del Sinaia a México. Es una fecha para recordar. Un abrazo.