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Un jueves, un relato: colores

COLORES


Un piso envidiable en el barrio de Chamberí de Madrid; una mujer maravillosa que daba color al mismo, y lo digo sin temor a equivocarme, porque una vez al año lo pintaba con desigual fortuna. Que si un año de azul “azafata”, que ella puntualizaba todavía más y lo definía como azul “piscina”; al año siguiente de verde “carruaje”, que yo llamaba “fosforito”. No entiendo por qué no le acabó de gustar que así lo llamase yo. Me gusta “fosforito”.


En fin, ella había recorrido casi todas las tonalidades del arco iris, pero con 100 apellidos diferentes. El amarillo no tenía sentido si no se le ponía otro apellido. Ella lo llamaba amarillo “Nápoles”. Ya digo que me convertí en todo un experto en colores, podéis preguntarme cualquier tonalidad y me la sé.


Y a todo esto, con 3 hijos maravillosos a la par que prometedores. Sí, el tercero fue por un desliz en Palma de Mallorca. No entraba en nuestros cálculos, no estaba previsto, lo llamábamos cariñosamente “el sobrasada”. Fruto de una cena salvaje con dicho alimento a mansalva. Y de la picante.  


Dos coches en el parking, y por supuesto la moto, caros todos ellos, y muy relucientes; una vida sexual lógica para nuestros 55 años. Sin alardes, pero sin aburrimientos. No hay nada peor que aburrirse en estos menesteres.


Y veíamos series continuamente por la tele. Ella descubría al asesino del hacha a las primeras de cambio. Yo siempre identificaba al mayordomo como el culpable de las muertes, y nunca era así. Nuestro perrito mientras tanto yacía a nuestros pies. Ya digo: una vida envidiable y encima sin hipoteca que pagar, una maravilla, y entonces ocurrió algo peor que asistir a una campaña electoral…


Apareció ella en mi vida.


El caso es que me acerqué un día con mi hijo “sobrasada” a comprar unas palmeritas a la pastelería de enfrente, la famosa “Hártate de nata” y estaba ella allí, sonriente.


Era nueva como dependienta, y su escote me encandiló. ¿Alguien sabe la fuerza que puede tener un escote? Pues sí, la tenía, y “sobrasada” y yo quedamos así como lerdos ante su despliegue en el vestir. Al finalizar nuestro pedido, nos sonrió una vez más y nos despidió con un llamativo:


“Adios bombones”


¡Joder!, a mí “bombón” nunca en la vida me lo habían llamado, en todo caso mi mujer me llamó alguna vez “cosita” . No, no entro en detalles.  


Ya en casa, contemplando el verde carruaje de las paredes comencé a pensar más y más en la susodicha dependienta de amplio escote y franca sonrisa. Cuando el diablo mete la cola…Y entonces me decidí: por la tarde volví a bajar a comprar. Para no levantar sospechas, decidí esta vez comprar bambas de nata. A veces soy muy astuto disimulando.


Y a partir de ahí, me tiré 2 meses bajando regularmente a comprar. Y comenzamos a hablar. Yo le hablaba de los nuevos colores de la casa y ella escuchaba, a continuación me hablaba y reía. Reía y me hablaba, mientras me decía que su color era el rojo pasión. Lo pillé enseguida. Creo que se llama a eso “echar una canita al aire”.


Como mi mujer, pensaría mucho en colorines, pero de tonta no tenía un pelo, era tal la cantidad de pastelitos que yo compraba a la semana que un día me siguió, y comprobó lo que se temía: el bombón y la del escote abrazados y nos besábamos apasionadamente teniendo por testigos la caja registradora, el paquete de bonys y bucaneros y también unas torrijas la mar de buenas.


Adios a mi casa de Chamberí, a mis series y a mi perro, y lamentablemente he roto toda relación con mi esposa. Encima, como ella es especialista en asesinatos, me hace temer por mi vida y voy con el casco de la moto todo el día puesto en la cabeza por si ella se decide a actuar con el hacha o similar. Más vale prevenir.


¿Se me nota el cambio? Bueno, en concreto, engordé 15 kilos de más con tanto pastelito con mi aventura pastelera y sudo un pelín más por la cabeza de tanto llevar el casco.  


Por lo demás, todo bien.


Bueno, un apunte final: a ella, la dependienta, acabó por cansarle el rojo pasión, me dejó también tirado y  ahora parece que le van los colores pálidos, y yo, que queréis que os diga, lo veo todo negro. Pero como veis, todo siguen siendo colores en mi vida. Eso sí: ahora soy más de torreznos que de bambas de nata y torrijas, y por cierto, ahora detesto el amarillo Nápoles. Y sigo engordando. Qué cruz.


FIN


Relato presentado a la convocatoria "un jueves, un relato" esta semana organizado por CECY . En su blog deshojandorelatos. Muchas gracias Cecy por la convocatorias


Besos y abraazotes y ya sabéis por donde ando https://santidepaul.wixsite.com/santidepaul


28 Comments

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Guest
Jul 18

Perverso final, cuanto cuesta un cana al aire, pero de la nata, nada . . Dios vuelve con flores y una cala para abrirle las puertas a tu señora.

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Santi Iglesias de Paul
Santi Iglesias de Paul
Jul 18
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Gracias invitado por tu comentario!!! y encima engordando más y más. A ritmo de los colores. Abrazotes y buena semana

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Guest
Jun 02

Espectacular,, Santi. Maravilloso. Que forma de recorrer los colores hasta el negro. Dicen que es elegante y adelgaza, pero no sé, unos toques de color nunca vienen mal. También el rojo pasión, aunque tu protagonista y la pastelera debieron ser un poco más listos!!! Me encantó.

Ardilla Roja


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Santi Iglesias de Paul
Santi Iglesias de Paul
Jun 02
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Gracias Caty!!! te confesaré que si alguna vez intento parecer más delgado, me pongo nikis oscuros/negros. Ese es mi secreto. Qué bueno que te haya gustado. Besos y buena semana!!!

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MJ RU1Z
MJ RU1Z
Jun 01
Rated 5 out of 5 stars.

¡Fantástico relato, Santi! Y con mucho sentido del humor, algo bastante difícil de lograr y con mucho mérito. Me ha encantado el juego que te traes con los colores, te ha quedado redondo. Para mí, un diez, o un cinco estrellas en este caso.

Un abrazo.

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Santi Iglesias de Paul
Santi Iglesias de Paul
Jun 02
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Muchas gracias MJ RU1Z!!! y gracias por esa puntuación. Se trataba de entretener a los compis y creo que lo he conseguido. Un beso y buena semana.

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Guest
Jun 01

Esta visto que el rojo pasión le hubiera sentido mejor al sobrasada que a su padre. Y así... una vez en la familia y sin levantar sospechas... quien sabe?

Gabiliante

Abrazooo

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Santi Iglesias de Paul
Santi Iglesias de Paul
Jun 02
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Gracias Gabiliante por tu comentario!!! Seguraemente hubiera pasado eso con el rojo pasión. Un abrazor y buena semana

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Guest
Jun 01

Jajajaja, que bueno. "El sobrasada" al menos la mejor solución, torreznos 😉 muy original Santi. Un abrazo

Nuria de Espinosa

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Santi Iglesias de Paul
Santi Iglesias de Paul
Jun 01
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Gracias Nuria!!! Uhmmmm q rica la sobrasada

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