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Mi nueva novela se topa con el coronavirus


El coronavirus es una mierda que nos ha cambiado la vida.

Nos ha arrebatado a seres humanos queridos, nos ha destrozado, modificado la existencia y encima nos ha arruinado. Pobre humanidad. Tal vez, haya que dejar constancia de lo que aquí ha pasado, de lo que nos ha ocurrido. Nosotros y las generaciones venideras nos lo merecemos. Hay que aprender de los errores. Hace falta. ¿Y si, por ejemplo, puestos a analizar, estudiamos cómo reaccionó ante el virus Grecia o Portugal?

Soy escritor, y algo parecido, pero en formato "guerrra", sucedió en 1596 cuando los ingleses invadieron Cádiz. Aquello igualmente fue una tragedia. Pero he aquí que yo le saqué partido. Buceando por la biblioteca del Museo Naval de Madríd, me encontré con un libro antiguo, de una crónica de lo que allí pasó. Una crónica del día a día, escrita a principios del siglo XVII por Fray Pedro Abreu. Y me empapé de ella y fue la base de mi novela "1596: cuando a Cádiz arribaron los ingleses" (se puede comprar en estos 2 portales LIBRERIA 1 y LIBRERÍA 2)

A partir de esa crónica diaria, yo metía y sacaba a mis personajes de la invasión aquella y los mezclaba con invasores y gaditanos, y así finalicé la novela. Una novela que creo ha gustado. Tal vez la que más gustó de las 5 escritas.

Haremos lo mismo ahora. Pero primero habrá que escribir una cronología de lo que ha sucedido y de lo que nos resta por vivir con esta pandemia, que esperemos sea poco tiempo de compartir. Todo arranca un 31 de diciembre en China, cuando se conocen los primeros casos con síntomas. Mira que hubo tiempo para reaccionar...

La cronología que estoy haciendo, no es tan fácil como parece. Todo está en función de la fuente a la que uno acuda y lea o vea para informarse. Beberemos de todas las fuentes, a ver si así encuentro la verdad. Lo haré por muchas razones, pero mayormente por los amigos que han fenecido y por los que han padecido el dolor. Será mi colaboración ante este drama que estamos viviendo.

Así que, vuelvo a hacer otro intento de volver a ser escritor. Suerte Santi, a ver si llegas a buen puerto.

Por lo demás, hago lo que todos: paseos por el pasillo, lata de cerveza, comiditas, ver tele, lata de cerveza, llamadas a mi chica, amigos y familia y ese tachar los días en espera de buenas noticias o incluso, no sé si lo he comentado, de la siguiente lata de cerveza. Uno llega a comprender mejor los sentimientos de presos, monjes, personas confinadas en hospitales y demás solitarios de la vida. Una conclusión...La soledad duele, pero habrá que llevarla lo mejor posible. De eso se trata. Y lo curioso es que toda esa gente llevan la soledad sin disfrutar de las latas de cerveza. Qué horror. Bueno, creo que me estoy obsesimahouonando.

Y algo me gusta Julio Iglesias, pero confiemos que su canción "Me olvidé de vivir" no se vuelva a convertir en "la canción del verano". Confiemos en el verano del 2020.

Besos y abrazotes, buena semana, y que todo esto vaya terminando, por favor

Se me olvidaba, si lo tuyo es más la música que la literatura...mi música podrás escucharla en MUSICA SANTI

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